domingo, 23 de abril de 2017

Cine, lo que vamos viendo. Cuatro reseñas (nº LXII)

Fecha estelar: -305690.6
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Películas reseñadas:

- La gran muralla (2016)
- Kimi no na wa (2016)
- Nae-bu-ja-deul (Inside men, 2015)
-  A las nueve cada noche (1967)


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La gran muralla (2016)
Dir. Zhang Yimou

Cuando uno lee la ficha de “La gran muralla” y ve que hay nada más y nada menos que seis nombres en el apartado del guion, entre ellos Marshall Herskovitz, Edward Zwick y Max Brooks como escritores de la historia, no puede más que preguntarse ¿qué puñetas estaban fumando mientras la ideaban? Porque estos señores tienen buenos títulos entre sus trabajos pero aquí han puesto su nombre en un guion infame sin pies ni cabeza elaborado a base de una mezcolanza de ideas vistas en otros lugares y puestas aquí con muy poca imaginación y mucha desidia. Es como si mezcláramos un poco de “Ataque a los Titanes” con la marabunta de “Space Troopers” y sus criaturas sociales controladas por una reina, eso sí, criaturas que por el aspecto y comunicación parece que han emigrado desde el planeta Pandora de “Avatar”. Ponemos un par de mercenarios colegas entre el ejército chino, también a Willem Dafoe que creo que es el que mejor lo hace con esa cara de no tener ni idea de qué es lo que está haciendo allí, un momento torero de verdadera vergüenza ajena, una historia que va de aquí para allá porque sí,…., un desastre. Una película con estos mimbres en manos de cualquier director americano actual especializado en el cine de acción y te entrega un bodrio de proporciones gigantescas. Y no le salvaría de ser un bodrio gigante nisiquiera la pasta que se han dejado en ella, tanto en efectos especiales a cargo de ILM (que tampoco es que se hayan matado a trabajar en este caso, hay muchos momentos con cante por peteneras), como en diseño de artilugios, armas y armaduras a cargo de Weta Workshop que pasa por ser de lo más destacable.

Al menos la dirección sí que hace que el producto no sea otro blockbuster malo de Hollywood y quede como simplemente pasable. A Zhang Yimou debe habérsele ido la cabeza para meterse en este berenjenal ideado por seis mentes. Al menos no lo hace pesado y largo, le aporta buen ritmo, sabe que si te paras mucho a pensar la película se va a pique así que mejor dar espectáculo visual con su buen estilo, que eso sí que no lo ha dejado. El uso del color en sus películas es siempre brillante, es marca de la casa y hace que, al menos, contemples una película que visualmente te atrapa por lo que se muestra y, sobre todo,por cómo se muestra. El escenario natural, este desierto coloreado natural y fotografiado de maravilla ya fue utilizado por el director en “Una mujer, una pistola y una tienda de fideos chinos” en el año 2009 donde el director de fotografía era el mismo que aquí, Zhao Xiaoding. Aquella película del 2009 sí que era también una ida de olla, pero comparada con ésta, es una obra maestra. A mí me pareció bastante buena. Luego están los encuadres y los panoramas y el movimento de cámara con tropas en formación o en movimiento, los colores, siempre los colores. Zhang Yimou ya lo hizo, y muy bien, en “Hero” (2004) y en “La maldición de la flor dorada” (2006). Se nota, Yimou tiene mucho oficio y en esta última película por poco que se deje llevar del mismo consigue llamar tu atención. Es lo único remarcable aquí.

Siempre he preferido mucho más al Yimou intimista de “Ni uno menos” o de la obra maestra “El camino a casa”, ambas de 1999. Desde este año hacia atrás, hasta “Sorgo rojo” (1988) , Yimou solo había hecho peliculones. Después se adentra en comedias o en épica y fantasía con resultados destacables en general, sobre todo “La casa de las dagas voladoras” (2004). Pero es en sus películas menores en parafernalia e intendencia donde podemos encontrar al mejor Yimou. Solo espero que esta última película, para mí la peor de su filmografía que he podido seguir casi al completo, sea una locura transitoria del director que le ha hecho aceptar rodar esta historia ideada por seis “mentes pensantes”.


5/10 - Pasable

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Kimi no na wa (Your name, 2016)
Dir. Makoto Shinkai


Dejando a un lado Hoshi o Ou Kodomo (Viaje a Agartha, 2011) que más me parece un homenaje que Makoto Shinkai hace de El castillo en el cielo de Miyazaki, pero incuso en esta película también pues ahí están las motivaciones de su protagonista y las del profesor Morisaki, todo el cine que Shinkai ha realizado hasta ahora tiene unos cuantos lugares comunes, temas que en mayor o menor medida siempre están presentes y que permiten al director asentar la idea de cómo aquel romance adolescente deja marcado para siempre el posterior vivir de sus protagonistas. Y estos lugares son la separación forzada o inevitable, la melancolía posterior, el recuerdo constante de aquellos días, el anhelo por el reencuentro, la rebeldía por el determinismo vital que les ha llevado a la situación en la que se encuentran. 
Y la vida escolar, y los trenes, y los pasos a nivel, y el caer de la nieve o los pétalos de cerezo, y la amplitud de los cielos, su luz, su color, sus rayos crepusculares, …. 

La reseña completa aquí
8/10 - Notable


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Nae-bu-ja-deul (Inside men, 2015)
Dir. Woo Min-Ho

Interesante thriller coreano que adolece de una duración excesiva pero que destaca por un par de interpretaciones bastante buenas, la de Yun-shik Baek y, sobre todo, la de Byung-hun Lee como gánster en busca de venganza. Porque también es otra película coreana sobre venganza.
A pesar de su larga duración la película no pierde ritmo en ningún momento, muy bien rodada y bien estructurada en base de ir hacia adelante y hacia atrás en el tiempo.
Intrigas políticas y judiciales en medio de un galimatías de nombres coreanos que, sin embargo, no confunden en base al buen guion que estructrura la historia. Y los bates, los martillos y las hachas que no pueden faltar para mostrar la violencia de la forma tan característica.
El único personaje que no cuadra en esta historia es, precisamente, la del fiscal. Dejando a un lado su parte y adaptando la historia a los otros dos protagonistas, creo, habría resultado una película muy superior.
El thriller coreano no tiene nada que envidiar a nadie, más bien al contrario, es un cine que ya nos gustaría se hiciera por estos lares.

6/10 - Interesante


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Our Mother's House (A las nueve cada noche, 1967)
Dir. Jack Clayton

Seis años después de The Innocents (Suspense, 1961), Jack Clayton vuelve con otra historia con niños, incluso repite con Pamela Franklin como una de las niñas protagonistas, para regalarnos un film que produce un tremendo desasosiego, intranquilidad rayana con el horror. Sobre todo en su primera mitad porque la llegada del padre (Dirk Bogarde) produce un notable cambio de ritmo en la película hasta su resolución final.
Es una constante en estas dos películas el mostrar la deriva que la estricta moral religiosa tiene sobre los actos de sus personajes, es el motor que conduce estas dos historias hasta el terror psicológico. Aquí siete hermanos, educados bajo una estricta moral religiosa, ven como su madre enferma muere y deciden ocultar la muerte por miedo al orfanato. Entierran el cadáver en el jardín e intentan vivir como si la madre viviera con ellos, la visitan cada noche y hablan con ella. Simplemente con el juego de luces, la iluminación y la fotografía oscura y la composición de un par de escenas, la muerte de la madre y las sesiones de las nueve de la noche, consigue Clayton casi ponerte los pelos de punta, pero estas escenas también tienen un cierto lirismo, no sé si malsano. Y no necesita mostrar mucho más, solo la sutileza de algunos planos es suficiente para permitir al espectador la especulación e imaginación sobre lo que pasa, sobre lo que pasó y sobre lo que está por venir. Una película sorprendente e inesperada con un plano final asolador.

Ver esta película en versión doblada es un problema pues no es nada fácil cuando de niños se trata y en algún caso la estridencia de las voces te saca de la película. Muy recomendable en versión original.
Como curiosidad mencionar que la melodía que acompaña en muchas escenas, la música es de Georges Delerue, es reconocible por haberla escuchado en alguna otra película, muy parecida, hasta que caigo en la cuenta de que es muy parecida (a mí me lo parece) a la que Quincy Jones compuso para El color púrpura de Steven Spielberg.
8/10 - Notable



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Recuerda, amigo lector, que estas reseñas están basadas única y exclusivamente en mi opinión y gusto personal que puede, o no, coincidir con la del resto de los mortales.





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